ESPEJO

Durante la actividad de la semilla me di cuenta de que mi pueblo siempre estaba presente, de una manera u otra, en la mayoría de mis proyectos. Albaida se convierte para mí en una fuente constante de inspiración: su cultura, sus monumentos, las calles por las que he caminado toda la vida… Todo eso construye mi mirada y mi forma de crear. Por eso, en este proyecto no podía ser diferente. Quise partir de esa memoria afectiva y visual, recogiendo pequeños fragmentos del pueblo para transformarlos más adelante en los azulejos dorados que estoy desarrollando.

En mi taller aparecen varios azulejos que tenía desde hacía tiempo. Nunca los había utilizado, pero siempre estuvieron ahí, como una idea pendiente. Muchas veces veía artistas en redes sociales que trabajaban con cerámica y me llamaba muchísimo la atención, así que decidí dar el paso y hacer algunas pruebas. Me inspiré en otra de mis grandes fuentes de creatividad: las flores. Jugué con colores y formas, experimentando con un material que, hasta ese momento, era totalmente desconocido para mí. Aunque el resultado no me convencía —los colores no destacaban como yo esperaba— esta fase fue importante, porque a partir de ella surgió una nueva idea: incorporar la tinta dorada como elemento central del proyecto, y por otro lado, incluir como diseño lo que realmente era la semilla de mi proyecto: Albaida.

Para avanzar en el proyecto, realicé una primera prueba digital en Procreate, en el iPad. Ilustré a la Virgen del Remedio, patrona de mi pueblo, inspirándome en el estilo tradicional del azulejo valenciano, que también forma parte de mi entorno. Esta prueba fue importante porque me permitió comprobar que el efecto dorado realmente funcionaba y transmitía esa sensación de valor y delicadeza que yo buscaba.

A partir de esta idea inicial, realicé tres bocetos más en el iPad y, con el fin de repetir las imágenes sobre los azulejos sin variaciones, imprimí estos diseños y utilicé papel de calco azul para transferirlos. De este modo, pude crear una pequeña serie más coherente y, al mismo tiempo, agilizar el proceso de trabajo. La idea ya iba cogiendo forma y el resultado me gusto mucho.

En este momento me encuentro en el punto en que los azulejos han cobrado sentido y forma, pero veo que todavia queda un proceso de coherencia y de ir más allá.  Me gustaría que fueran cuatro diseños, por el hecho de hacer varias combinaciones; o también se me ocurre hacer los diseños a partir de muchos azulejos juntos, de manera que la imagen sea más grande y que esté compuesta por pedacitos de azulejo. Son ideas que estoy meditando para que el resultado final tengan una coherencia, un sentido, que se vea un proyecto completo, en el que cada paso ha llevado a un resultado final gratificante.

Entrada similar

Deixa un comentari